
Al comienzo, y exceptuando la primera semana cargada de ensayos con su estreno en Guadalajara, teníamos como mucho dos tres días de trabajo a la semana y el resto del tiempo lo echábamos en conocer la ciudad de turno y, sobre todo, la piscina del hotel que tocase.
Por lo que iba a ser más duro el trabajo en agosto era porque el grueso de representaciones estaban concentradas en ese mes.
La dos primeras semanas las pasamos en México D.F. y nuestra programación constaba de una función diaria de miércoles a viernes más dos el sábado y dos el domingo. En realidad, cuando disfrutas de tu trabajo de la manera en que me pasa a mí y subirte a un escenario te sirve de terapia y te ayuda a olvidar las cosasa malas, las penas, y te sientes en armonía y feliz, un ritmo d trabajo como ese no supone nada.

Cuando estaba en el barco y me llamaron para este trabajo me dijeron "vas a hacer el papel de Pedro Espadas" y Pedro, que yo ya lo conocía de antes, interpretaba a Smee y punto. Sin mebargo, al llegar a Madrid y llevar ya algunos días de ensayo, me dijeron "luego pasamos contigo el Jefe Indio" y yo respondí con esa elocuencia que me caracteriza y ese don de palabra "¿Que quéeeeee?"; "¿No te han dicho que el cover de Israel y tienes que estudiarte el Jefe Indio?", "Nop" dije yo... Así que, al final, la escena de texto y, lo que más me imponía, la canción como solista que tiene este personaje. Esto ocurría, aclaro, porque a su vez Isra era el cover de Capitán Garfio así que, cuando él tuvo que salir (en dos ocasiones) yo pude disfrutar también dando vida a otro personaje diferente, algo que me encantó y hasta me dió pnea poder hacerlo sólo esas dos veces.
Un "kitkat" en la gira.
Aprovechando que teníamos un par de días libres semanal, al tener más tiempo libre pudimos ir a pasar una jornada a Six Flags, con varios de los compañeros del elenco que eran de allí (loa actores éramos españoles y los bailarines mejicanos). ¿Que qué es Six Flags? pues es, explicado rápidamente, el parque de atracciones Warner pero en vez de en Madrid, en Méjico. Nos subimos en todas las montañas rusas: Superman, Batman, la de madera, las de agua... vamos, todas las que caían. Nos hinchamos a comer hamburguesa, kilos y kilos de palomitas de maíz (con y sin chile), algodón de azucar, me tosté todo el cuello, cara y brazos por culpa del sol (y de que no me puse protección solar porque soy medio idiota) y, atención aquí viene uno de mis momentos favoritos aproveché que el cambio de euros a pesos mejicanos nos favorecía para comprarme esto:

...ya te dije en otro post que pensaba darte envida, Oscar, jejeje. Fue un día de los mejores, de verdad.
INCISO. Aunque la moneda fluctua, como en cualquier país, y a veces tieen más fuerza y otras menos, a nosotros el cambio nos salió por 16 pesos 1 euro; es decir y por redondear: 10 euros eran 160 pesos. La gorra me costó 180 pesos así que no está mal porque salen poco más de 11 euros y esta misma en el parque de España (si es que está en Warner a la venta) no creo que baje de 20 euracos del ala. FIN INCISO.
Si desde que empezamos tuvimos que ir abrigaditos casi todos los días por el frío y las lluvias, cuando llegamos a Monterrey la cosa cambio por completo y nos íbamos derritiendo por las calles.
Monterrey es una de las ciudades que se encuentran al norte de México así que, como podéis suponer, es también una de las más americanizadas al encontrarse en la frontera con Estados Unidos. De allí me quedo con tres recuerdos: la tarde que llegamos y que nos metimos como locos en un buffet libre y comimos hasta reventar (de hecho luego ni cenamos), la noche de la cena a la luz de las velas y el público de aquella ciudad; os puedo asegurar con diferencia que era de los mejores de todo el país junto a Guadalajara. Se reían y aplaudían por todo y daba igual si teníamos a 100 personas que a dos mil, porque estaban entregadísimos.
En una de las paradas de este mes fuimos a ver el Castillo de Chapultepec que, de tan grande que es, sólo me dió tiempo a ver bien las exposiciones de la sala de abajo. No pude sacar fotos con mi cámara pero, si pincháis en el link que os he dejado preparado, podréis ver imágenes de internet. El castillo os lo dejo a continuación.



Y para acabar, aunque el orden correcto es que esta fué la primera excursión que hicimos, os dejo fotos de nuestra visita a las piramides de Teotihuacan justo aquí debajo:


Nunca, jamás, me ha pasado en un grupo de teatro lo que me ha ocurrido en este. Sí que es cierto que a nivel personal mi estado de ánimo cambió completamente; empecé la gira de una forma y volví a España completamente renacido cuál ave fénix pero, aunque he notado el cambio, no soy consciente de cuando ocurrió.

Gracias por ese tiempo, por la alegrías y los buenos momentos. Gracias a los que me comprendieron y se abrieron a mí y gracias, también, por darme la oportunidad de mostrarme como soy. Gracias por no ser sólo compañeros y por ser además amigos. Y, sobre todo, gracias por curar esas heridas y devolverme la alegría.
Espero que nos volvamos a ver pronto.
